domingo, 30 de enero de 2011

ALCACHOFAS AL HORNO




Está es una receta que redescubrí hace unos años en un pequeño bar de menús cerca de mi primer estudio en Barcelona. No recuerdo el nombre del local, sí que lo dirigía un padre con sus 3 hijas (eran 5 hermanos en realidad). Lo gracioso del caso era que su aspecto desencajaba totalmente con el ambiente; la cosa es que él había sido un rico empresario que se quedó en la ruina y montó el "negociete" para salir del paso.., y lo consiguió sin problemas: eran simpatiquísimos y la cocina era deliciosa. Todo casero y sencillo, hecho por su esposa, que se dedicaba a elaborar algunas de las recetas en su casa durante la mañana para bajarlas al bar en el momento justo; este era el caso de estas estupendas alcachofas...
Comentaba que las redescubrí, por que recordé entonces que mi padre las solía hacer de la misma forma, aunque él añadía vinagre.., -¿Vinagre?-, me dijo en una ocasión la cocinera del bar del que os hablaba, girando ligéramente los labios. - ¡No, no! No pongas vinagre...- ¡Cuanta razón tenía!
En casa solemos comerlas a menudo, ahora que es temporada (me refiero al invierno). Importante que sean muy frescas (apretad el cuerpo ligeramente y si están algo blandas es señal de que llevan varios días cortadas.., yo prefiero esperar a encontrarlas fresquísimas) y más bien grandes...

La receta es muuuuuuuuuuy fácil de elaborar y los resultados son muuuuuuy satisfactorios:

        
              INGREDIENTES:

- 2 alcachofas por persona
- aceite virgen de buena calidad.
- abundante sal y algo de pimienta.


              PREPARACIÓN:

1- Cortar el pedúnculo de las alcachofas a ras de las hojas para que queden de pie perfectamente. Dar unos golpecitos suaves en la parte superior de la verdura, contra la mesa de trabajo, con el fin de que se abran un poco y puedan penetrar bien los líquidos. lavarlas abundantemente llenándolas y vaciándolas de agua un par o 3 de veces. reservar.


2- preparar unas hojas de papel de aluminio, dipositar las alcachofas encima boca arriba. colocar un puñadito de sal encima de cada una de ellas, rociarlas con un buen chorro de aceite y espolvoread un poco de pimienta negra (mejor recién molida siempre..: venden unos botes de especias con molinillo incorporado fantásticos!).
3- cerrad las alcachofas con el aluminio como si se tratase de una "Papillote". No debe escaparse el vapor por ningun lado.
4- introduciremos en el horno a 190-200 ºC por espacio de 2 horas (muy importante).
5- sacar y servir en el mismo envoltorio. Tened cuidado al abrir o romper el aluminio: los vapores del interior están también a 200 ºC y queman también (no así el aluminio, que al ser un mal transmisor te permite el manejo inmediatamente después de sacarlo del horno).
6- estás alcachofas se comen deshojandolas y mordiendo el tallo de la hoja desde la zona que no opone resistencia, sin apretar demasiado los dientes para asegurarnos de comer únicamente la parte más tierna. Al final solo nos quedará el corazón de la alcachofa, menos salado que las hojas pero con todo un golpe de sabor a "huerta" escondido en su interior... En mi caso suelo darle uno de mis corazones a mi mujer por que le chiflan!! Ooohhhh!!! ahora veo lo bonito que suena eso (... Y CURSI, XDDD!!! Jajaja!!)


                                                    
                                                             BON PROFIT!!!

sábado, 22 de enero de 2011

POLITO'S BARBECUE RIBS





Pues aquí va mi primera receta auténticamente "ajena": es una receta de mi amigo Mario (comunmente llamado "Polo" o "Polito", de ahí el nombre de la receta) en realidad...
La cosa es que ya me había hablado de lo buenas que estaban sus costillas de cerdo a la barbacoa (al más puro estilo norteamericano), pero no imaginé que lo estarían tanto, hasta que nos invito a comerlas el fin de semana pasado: ¡¡BRUTALES!! Son tan buenas que desaparecen a una velocidad alucinante...
Ese día éramos 6 adultos y se habían cocinado 4 costillares de cerdo. A mí me pareció perfecto, o sea que contad con 2 costillares por cada 3 personas (si no cuadra, la original de Polito es uno x persona, ya sabeis); os aseguro que no importa el tipo de personas: si les gusta la carne, ¡arrasarán! (independientemente del tipo de constitución física).
Como siempre, disculpadme por la foto.., necesito ¡YA! una cámara réflex en condiciones para casa (ya se sabe que, "en casa del herrero...").


              INGREDIENTES:

- 4 costillares de cerdo para 6 personas (1 por persona si soys de buen comer, insisto).
- 1/2 litro de Ketchup.
- 1/2 kg de azúcar moreno (cubierto con agua como para hacer un almíbar, solo que no esperaremos a que
   se disuelva)
- 3 cs** de azúcar blanco.
- un vasito de vinagre de vino blanco (50 cl más o menos).
- 2 cs de cebolla seca (en la zona de alimentación de Ikea tienen una buenísima) o una cebolla fresca
   pequeña muy trinchada, en su defecto.
- 1 cs de ajo seco.
- 3 cs de mostaza de Dijon (si no la mostaza antigua también vale).
- un chorrito de salsa Perrins.
- Tabasco al gusto.
- 2 cs de salsa de carne (aquí yo le comenté que tenía guardado en cubitos un increible fondo de carne y
   le pareció muy buena idea..: 4 cubitos en ese caso. el comercializado es muy concentrado).
- Sal maldon (recordad que sala algo menos que la común) y pimienta blanca.


             PREPARACIÓN:

1- Salpimentamos (sin olvidar que la salsa ya es muy sabrosa) y disponemos los costillares en una fuente honda apta para el horno .
2- introducimos el resto de ingredientes en una cazuela y dejamos hervir a fuego más bien lento, durante 40 minutos.
3- untamos los costillares con la salsa, tapamos la fuente con papel de aluminio a conciencia (no debe quedar ningún punto de respiración; como en una papillote), dejamos enfriar e introducimos en la nevera toda una noche (si lo preparamos la tarde-noche del día anterior, maceraría unas 18 horas hasta el mediodía siguiente y sería perfecto).
4- Precalentamos el horno a 220 ºC. Introducimos las costillas "sin destapar" y horneamos durante 40 minutos. Destapmos después y seguimos cocinandolas hasta que adquieran un espectacular color rojizo dorado (¡véase la foto, que está SIN retocar!!!); serían de 20 a 30 minutos.
5- Separad someramente los costillares, en grupos de 3 ó 4 costillas con ayuda de unas tijeras o un cuchillo afilado, servid (acompañadas de unas patatas panadera, o un sencillo puré de patatas muy denso, sería ya immejorable) y comed sin parar por si hay algún "ágil" entre vosotros y os tocan a menos... ¡Ah! ¡evidéntemente, con al única ayuda de vuestros propios dedos, claro! (¡o los de quién os apetezca.., yo ya, ahí, no me meto, oiga!)...



     (y en honor a nuestro cocinero "Super POLO")   BO PROVEITO!!!!



**cucharadas soperas.